La proyección de crecimiento para América Latina fue ajustada a la baja

El Fondo Monetario Internacional (FMI) revisó a la baja las previsiones de crecimiento para América Latina y el Caribe en 2024, situándolas en un 1,9%, lo que representa una disminución de 0,4 puntos porcentuales respecto a las estimaciones de octubre. Esta revisión se atribuye principalmente a la crisis económica en Argentina, donde se pronostica una contracción del 2,8% este año.

El informe destaca un crecimiento negativo en Argentina, vinculado a un significativo ajuste de políticas para restaurar la estabilidad macroeconómica, lo que ha llevado a una disminución del 5,6% en la previsión de crecimiento en solo tres meses.

En conjunto, el fuerte decrecimiento en Argentina ha impactado la media de crecimiento para la región. Sin embargo, se espera un crecimiento del 2,5% en 2025, una décima más.

Excluyendo a Argentina y Venezuela, la tasa de crecimiento para este año se situaría en un 2,4%, y para el próximo año, en un 2,3%, según Petya Koeva, subdirectora del Departamento de Investigación del FMI.

A pesar de ello, las dos principales economías de la región, México y Brasil, experimentarán un crecimiento mayor de lo esperado. México se proyecta a crecer un 2,7% este año y un 1,5% en 2025, mientras que Brasil espera un crecimiento del 1,7% en 2024 y el 1,9% el otro año.

Estas mejoras se deben a los efectos de arrastre de una demanda interna más fuerte de lo anticipado y a un crecimiento mayor de lo esperado en las economías de los grandes socios comerciales.

A pesar de las tensiones en Argentina, el FMI ha intensificado las críticas al Gobierno de Alberto Fernández por no cumplir con los objetivos clave del programa de facilidades extendidas. El reciente acuerdo entre Argentina y el FMI busca desembolsar 4,700 millones de dólares para ayudar al país sudamericano a afrontar sus vencimientos de deuda y respaldar los esfuerzos políticos del Gobierno de Javier Milei.