Asciende a 24 el número de víctimas mortales en los incendios en California

El sur de California enfrenta una de sus peores crisis por incendios forestales. Hasta el momento, el fuego que arrasa Los Ángeles ha dejado un saldo de 24 víctimas fatales, mientras miles de bomberos y voluntarios luchan contra las llamas que amenazan comunidades enteras.

El foco más devastador se encuentra en el barrio de Palisades, donde las llamas han consumido 9,500 hectáreas y destruido 5,300 estructuras. En esta área, 105,000 personas han recibido órdenes de evacuación y otras 87,000 permanecen en alerta. Por su parte, en Pasadena y Altadena, las llamas de Eaton han sido contenidas en un 33%. Mientras tanto, en el suburbio de Sylman, al norte de Los Ángeles, el incendio de Hurst está casi extinguido, con un 95% de contención, según informó Cal Fire.

El Servicio Meteorológico Nacional ha emitido una alerta roja de "situación particularmente peligrosa" debido a las condiciones de sequía extrema que afectan a las zonas impactadas. Además, los fuertes vientos de Santa Ana, que soplan desde el lunes, amenazan con avivar los incendios, alargando la emergencia hasta al menos el miércoles.

Ante la magnitud de la tragedia, se han desplegado más de 5,000 bomberos en la región, a los que se sumaron 72 efectivos mexicanos que llegaron este lunes para reforzar las labores en Palisades. Asimismo, más de 1,800 miembros de la Guardia Nacional están colaborando en las tareas de contención, y se espera la llegada de más recursos humanos y materiales.

Por su parte, el gobernador de California, Gavin Newsom, anunció una partida adicional de al menos 2,500 millones de dólares para apoyar la recuperación. Este presupuesto estará destinado a la limpieza de zonas afectadas, la preparación para futuros incendios y la reapertura de escuelas cerradas por la emergencia.

El balance de daños es alarmante: más de 12,000 estructuras han sido destruidas por las llamas en Los Ángeles. La comunidad sigue también pendiente de los incendios Lidia, Sunset y Kenneth, que afortunadamente ya han sido sofocados, mientras que los esfuerzos continúan para apagar los focos de Palisades, Eaton y Hurst.

La situación en Los Ángeles es un sombrío recordatorio de los retos que enfrenta California debido al cambio climático y la intensificación de los incendios forestales. La colaboración entre brigadas internacionales, el apoyo gubernamental y la solidaridad de la comunidad son claves para superar esta crisis. Sin embargo, también es fundamental implementar medidas preventivas para evitar que estas tragedias sigan cobrando vidas y destruyendo hogares en el futuro.