Inundaciones en Brasil dejan al menos 83 muertos

Las intensas precipitaciones que han azotado el estado más austral de Brasil, Rio Grande do Sul, han desencadenado una tragedia con un saldo humano devastador. Hasta el momento, al menos 83 personas han perdido la vida, mientras que más de un centenar aún permanecen desaparecidas, según las autoridades locales.

El impacto de las tormentas se ha extendido por la gran mayoría de las cerca de 500 municipalidades del estado, dejando a unas 122 mil personas desplazadas. Las consecuencias de estas condiciones climáticas extremas han sido catastróficas: carreteras y puentes han quedado destruidos, se han registrado deslizamientos de tierra y, alarmantemente, una presa en una central hidroeléctrica ha sufrido un colapso parcial, intensificando la magnitud de la crisis.

El gobernador Eduardo Leite ha advertido que el recuento de víctimas podría aumentar significativamente a medida que los equipos de rescate accedan a áreas aún inaccesibles. A su vez, la preocupación persiste, ya que aún hay 111 personas desaparecidas, una cifra que ha ido en aumento en los últimos días, lo que refleja la gravedad de la situación.

En respuesta a esta emergencia, el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, ha asegurado que el gobierno no escatimará esfuerzos ni recursos para la reconstrucción de la región, mostrando solidaridad con el pueblo gaúcho y anunciando medidas extraordinarias de auxilio financiero que serán votadas en el Congreso en los próximos días.

Sin embargo, a medida que la ayuda llega, también se enfrentan a desafíos adicionales, como el aumento de la criminalidad, con reportes de saqueos en varias localidades afectadas, resaltando la complejidad de la situación y la urgencia de la respuesta.