Cibercriminales utilizan "Typosquatting" para robar datos de usuarios
Esta modalidad implica la creación deliberada de dominios fraudulentos que guardan una similitud con las originales.
En una nueva estrategia para apoderarse de información valiosa, los delincuentes digitales están utilizando una técnica conocida como "typosquatting" dentro de su arsenal de estafas en línea.
Esta modalidad implica la creación deliberada de dominios (páginas web) fraudulentos que guardan una similitud sorprendente con nombres de empresas u otras instituciones reconocidas. La clave distintiva de esta táctica es que estos dominios están intencionalmente escritos de manera incorrecta.
Algunos usuarios al ingresar la URL de un sitio web suelen escribirla erróneamente sin darse cuenta, es así que los delincuentes juegan con las semejanzas entre las direcciones legítimas y las alteradas por ellos. Su objetivo final es redirigir a los visitantes desprevenidos hacia versiones falsificadas, meticulosamente diseñadas para perpetrar estafas y secuestrar datos sensibles.
Por ejemplo, las personas en vez de ingresar a "amazon.com", estarían dirigiéndose a "arnazon.com". Aquí, las letras "rn" están estratégicamente juntas para dar la impresión de una "m". Estos detalles sutiles, fácilmente pasados por alto por un usuario apresurado o inatento, pueden socavar gravemente la seguridad de sus datos personales.
En otros casos, optan por agregar letras adicionales a la dirección original, como en "gooogle.com" en lugar de "google.com". También se ha observado la inversión de la posición de letras para confundir aún más a los usuarios, llevándolos a caer en la trampa.
Para reducir estos riesgos, los expertos recomiendan verificar minuciosamente la dirección en la barra de direcciones del navegador para asegurarse de que no haya errores evidentes.
La lucha contra los cibercriminales se desarrolla en múltiples frentes, y el "typosquatting" es solo uno de los muchos trucos en su repertorio. Mantenerse alerta y adoptar prácticas de seguridad cibernética sólidas se vuelve imperativo en un mundo digital cada vez más peligroso.