México tiene el mayor rezago de estudiantes por educador
México es seguido por Reino Unido con 20.8 educandos en primaria y 16.4 en secundaria, mientras que Estados Unidos lo sigue con 16 estudiantes con respecto a profesor, tanto en el nivel primaria como secundaria.
Como parte del Objetivo de Desarrollo Sostenible 4 (ODS 4), la comunidad internacional se ha comprometido a lograr la educación primaria y secundaria universal para 2030.
No obstante, de acuerdo a estimaciones de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), a la fecha es evidente la escasez de docentes en educación básica a nivel global.
De acuerdo a un reporte de Statista, existe una variación de la tasa alumno-docente en todo el mundo, en la que México tiene el mayor rezago de estudiantes por educador, con 24.9 de alumnos en primaria y 30.9 estudiantes en secundaria.
Hay sistemas educativos que están siendo totalmente dirigidos hacia el logro del ODS 4, con el fin de conseguir que todos los niños estén en la escuela y aprendiendo. Sin embargo, algunos de ellos no han dado prioridad a quienes están en las aulas todos los días: los docentes.
El estudio revela que dentro de los 10 países con mayor discrepancia entre el promedio de alumnos por educador, México es seguido por Reino Unido con 20.8 educandos en primaria y 16.4 en secundaria, mientras que Estados Unidos lo sigue con 16 estudiantes con respecto a profesor, tanto en el nivel primaria como secundaria.
El fin del ODS 4 es garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad, que haga posible fomentar las oportunidades de aprendizaje para todos.
De tal forma, Statista señala que superando a Francia, Alemania, Japón y el promedio de países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE); España, Bélgica y Noruega son las naciones con mayor avance con respecto alumnos por docente, con 12.6, 12.1 y 10.5 estudiantes en primaria así como 9.8, 9.3 y 10.2 educandos en secundaria, respectivamente.
Sin duda, las cifras anteriores reflejan la inminente necesidad de aumentar el número de profesores en el mundo, para poder lograr la consecución de los objetivos educativos hacia 2030. Pese a ello, más allá de la cantidad de docentes, también es apremiante contar con educadores que estén bien preparados y remunerados.