Dina Boluarte, presidenta número 13 en Latinoamérica
A la fecha, se contabilizan 22 mujeres presidentas o jefas de Estado en el mundo.
En medio de un momento histórico en Perú y la controversia por la detención de Pedro Castillo, presidente que estaba en turno; Dina Boluarte se convirtió en la primera mujer en llegar al cargo de Presidenta en el país Latinoamericano.
Según datos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), con el ascenso de Dina a la presidencia, a la fecha se contabilizan 22 mujeres presidentas o jefas de Estado en el mundo. Siendo Europa la región donde más féminas se agrupan en posiciones altas de gobierno, Boluarte es la presidenta número 13 en la historia de Latinoamérica.
“Antes que política, soy ciudadana y madre peruana que tiene conocimiento de la alta responsabilidad que la historia pone en mis hombros”, declaró la mandataria durante la toma de protesta de su cargo.
De esta forma, tanto en las empresas como en el gobierno, cada vez son más las mujeres que han roto el llamado “techo de cristal” destacando por su creatividad, planificación, gestión, liderazgo, negociación y resiliencia, entre otras cualidades.
“Tan solo en las empresas, cuando se tiene una mujer en puesto de alta dirección, se genera 10.1% más de retorno de inversión, mientras que en las organizaciones que no tienen ese talento, solo generan 7.4%”, indica un informe del Centro de Investigación de la Mujer en la Alta Dirección del IPADE.
Este 2022, Xiomara Castro también llegó a la presidencia de Honduras, siguiendo así los pasos de otras líderes que han aminorado la brecha en la historia de Latam como: María Estela Martínez de Perón, de Argentina; Lidia Gueiler, de Bolivia; Ertha Pascal-Trouillot, de Haití; Violeta Barrios de Chamorro, de Nicaragua; Rosalía Arteaga, de Ecuador; Mireya Moscoso, de Panamá; y Jeanine Añez, de Bolivia.
Por ahora, el mayor reto de Dina Boluarte será crear una ruta de estabilidad social y económica en el Perú. Sin embargo, su llegada a la presidencia representa un nuevo hito en el camino a reducir la brecha de género en la región.