México: desafíos después de la despenalización del aborto
Aunque se despenalizó el aborto en todo el país, el desafío principal radica en garantizar atención médica de calidad que respalde el procedimiento.
El pasado miércoles, la Suprema Corte declaró inconstitucional la prohibición del aborto en el Código Penal. Con la despenalización a nivel federal de este procedimiento, las mujeres de todo país deberán tener acceso a abortos seguros y asistencia médica. Sin embargo, el verdadero reto será ver a partir de ahora qué planes de acción se ponen en marcha para garantizar el cumplimiento de esta ley.
La Subdirectora de GIRE(Grupo de Información en Reproducción Elegida), Isabel Fulda, expresó que “faltaría regular en la Ley de Salud, que haya una reforma para establecer bajo qué términos sanitarios se da el servicio”. Pues actualmente no se cuenta con las condiciones necesarias para poder brindar a todas las mujeres el servicio correcto.
Además, una contradicción a la despenalización aparece, ya que el poder judicial sigue reconociendo el derecho del personal de salud a ejercer objeción de conciencia en casos de aborto. Aunque se descarta la posibilidad de una "objeción institucional" para evitar situaciones en las que un centro médico en su totalidad se niegue a brindar el servicio.
A pesar de que la normativa esté claramente definida, en México aún se enfrenta un largo recorrido para llevar a cabo la ejecución efectiva de estas políticas. En las instancias de salud, ya se está reconociendo que los costos asociados con el aborto no seguro son significativos, y se comprende que esto trasciende más allá de la simple despenalización, constituyendo un asunto crucial en términos de equidad social y el acceso al derecho fundamental a la atención médica.