Jóvenes peruanos crean cajero automático que incentiva el reciclaje

En un esfuerzo por fomentar el reciclaje en Perú, un grupo de estudiantes arequipeños, liderados por José Adolfo Quisocala, ha desarrollado un innovador cajero automático que deposita dinero en una cuenta bancaria a cambio de botellas de plástico. Este dispositivo convierte cada kilo de botellas en aproximadamente un nuevo sol, incentivando a la población a reciclar de manera efectiva y económica.

José Adolfo Quisocala, conocido como el 'banquero más joven del mundo', fundó hace 12 años el proyecto del Eco Banco del Estudiante Bartselana. Este banco ecológico promueve la educación e inclusión financiera entre niños, adolescentes y jóvenes mediante la conversión de residuos sólidos en una “eco moneda”. Actualmente, el proyecto cuenta con más de 8,000 jóvenes y colabora con más de 30 colegios en Arequipa, extendiéndose también a Lima en alianza con la Municipalidad de Los Olivos.

El cajero automático ecológico permite a cualquier persona depositar botellas de plástico vacías, las cuales son reconocidas por la máquina que luego deposita el equivalente monetario en la cuenta del usuario en el Banco del Estudiante Bartselana. Si la persona no es socia del banco, el dinero acumulado se puede donar a diversas fundaciones y proyectos sociales. Josselyn Lobos, estudiante de Tecsup y co-creadora del cajero, explica que este sistema no solo beneficia económicamente a los usuarios, sino que también contribuye al cuidado del medio ambiente.

Actualmente, el primer prototipo del cajero automático se encuentra en el Instituto Tecsup, donde está pasando por pruebas finales antes de ser instalado en centros comerciales de Arequipa. Quisocala y su equipo buscan evaluar la reacción e interacción de la población con la máquina para mejorarla y expandir su uso a más localidades, incluyendo Lima. El joven innovador también está en la búsqueda de inversionistas y empresas privadas que deseen apoyar esta iniciativa.

La iniciativa de José Adolfo Quisocala y su equipo no solo representa un avance tecnológico significativo, sino también una propuesta concreta para fomentar una economía circular en Perú. La implementación de estos cajeros automáticos podría cambiar la forma en que la población maneja sus residuos, convirtiendo el reciclaje en una actividad económicamente viable y socialmente responsable.