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Triunfo de Maduro divide opiniones y desata fuertes reacciones internacionales

Líderes de EE. UU., Europa y América Latina piden transparencia y verificación de los resultados, mientras aliados de Maduro celebran su victoria.

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Triunfo de Maduro divide opiniones y desata fuertes reacciones internacionales

Luego de las polémicas elecciones en Venezuela, donde Nicolás Maduro fue declarador ganador con el 51.20% de los votos, según el Consejo Nacional Electoral (CNE), las reacciones internacionales no se hicieron esperar. Mandatarios como Putin y el líder chino, Xi Jinping, felicitaron al presidente de Venezuela. Sin embargo, esta reelección ha generado una ola de reacciones internacionales marcadas por la desconfianza y acusaciones de fraude.

La oposición venezolana rechazó los resultados anunciados por el CNE y proclamó a su candidato, Edmundo González Urrutia, como el presidente electo del país. María Corina Machado, líder opositora, afirmó que es “imposible” confiar en los resultados difundidos, ya que los datos no coinciden “con toda la información que nosotros tenemos”. El resultado declarado por el CNE permite a Maduro asumir un tercer mandato, extendiéndose desde enero de 2025 hasta enero de 2031.

Desde Estados Unidos, el secretario de Estado, Antony Blinken, expresó "seria preocupación" y subrayó la importancia de un conteo justo y transparente de los votos. "Ahora que concluyó la votación, es de vital importancia que cada voto sea contado de forma justa y transparente", indicó Blinken, llamando a las autoridades electorales a publicar el recuento detallado de los votos para asegurar la rendición de cuentas.

La Unión Europea también reaccionó con cautela. Josep Borrell, jefe de la diplomacia europea, pidió a Venezuela que garantice una "total transparencia del proceso electoral, incluyendo el conteo detallado de los votos y el acceso a las actas de votación de mesas electorales". En una línea similar, el ministro español de Relaciones Exteriores, José Manuel Albares, solicitó la "publicación de las actas mesa por mesa" y que "se mantengan la calma y el civismo".

En América Latina, las respuestas fueron contundentes. El presidente colombiano, Luis Gilberto Murillo, pidió un "conteo total de los votos, su verificación y auditoría de carácter independiente" para despejar cualquier duda sobre los resultados. Gabriel Boric, presidente de Chile, consideró los resultados "difíciles de creer" y exigió "total transparencia de las actas y el proceso, y que veedores internacionales no comprometidos con el gobierno den cuenta de la veracidad de los resultados".

En un tono más vehemente, el presidente argentino Javier Milei denunció: "Dictador Maduro, afuera!!!" y agregó: "Argentina no va a reconocer otro fraude". Por su parte, Perú comunicó que "varios países de la región" están trabajando en "acciones conjuntas para asegurar que se respete indubitablemente la voluntad del pueblo venezolano". "No hay vuelta atrás, tome el tiempo que tome", afirmó el ministro de Relaciones Exteriores, Javier González-Olaechea.

Sin embargo, los aliados de Maduro celebraron su victoria. El presidente ruso, Vladimir Putin, y el líder chino, Xi Jinping, felicitaron a Maduro y reafirmaron su apoyo. Miguel Díaz-Canel, presidente de Cuba, manifestó: "Hoy triunfó la dignidad y el valor del pueblo venezolano sobre presiones y manipulaciones". De igual forma, los mandatarios de Nicaragua, Bolivia y Honduras destacaron la resistencia del pueblo venezolano ante las presiones internacionales.

La reelección de Nicolás Maduro ha polarizado a la comunidad internacional, con fuertes críticas y denuncias de fraude por parte de varios gobiernos y líderes, mientras que sus aliados más cercanos celebran su continuidad en el poder. La legitimidad del proceso electoral en Venezuela sigue siendo cuestionada, poniendo en duda la estabilidad política y social del país.