Industria naranja como sector clave en Latam
La industria naranja juega un papel importante en la mediación de la transformación digital en la región.
La llamada industria naranja, como se conocen a las industrias creativas, ha comenzado a ser trascendente para la economía, ya que posterior a la pandemia por Covid-19, ha habido un incremento considerable del número de personas y empresas que trabajan en este sector.
De acuerdo a la Organización de la Naciones Unidas para la Educación Ciencia y Cultura (UNESCO), este mercado representa un 3% del PIB Mundial, ya que da empleo a 29.5 millones de personas en el mundo, más de lo que aportan sectores como el de las telecomunicaciones.
“Las industrias creativas se definen como los ciclos de creación, producción y distribución de bienes y servicios que utilizan creatividad y capital intelectual como insumos primarios”, detalló en un comunicado la Conferencia de Naciones Unidas para el Comercio y el Desarrollo (UNCTAD). “Asimismo, estimulan la innovación y la diversificación de la economía, apoyan el espíritu empresarial y contribuyen a la diversidad cultural”, agregó.
Según cifras de la UNESCO, las industrias culturales y creativas generan actualmente 2.25 millones de dólares (mdd). Y aunque la creatividad no es ninguna novedad como tampoco lo es la economía, lo nuevo es la relación entre una y otra, y la forma en que se combinan para generar valor económico y objetivos de mercado.
Al respecto, diversas naciones latinoamericanas han lanzado iniciativas para apoyar a las industrias creativas locales, con el fin de convertirlas en un importante rubro de su economía nacional.
Sin duda, el creciente reconocimiento sobre la importancia que tiene este mercado junto al de los contenidos digitales, como sectores que serán claves para el crecimiento económico, posiciona a la industria naranja como un buen negocio para la región.