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Natalidad en Estados Unidos: un declive pospandémico

La caída en los nacimientos durante el 2023 señala un retorno a las tendencias preexistentes, marcando el fin de un breve repunte posterior a la pandemia.

Natalidad en Estados Unidos: un declive pospandémico
Natalidad en Estados Unidos: un declive pospandémico

En el año pasado, hubo una disminución en los nacimientos en Estados Unidos, con poco menos de 3,6 millones de bebés nacidos, cifra que representa una reducción de alrededor de 76,000 respecto al año anterior, alcanzando así el nivel anual más bajo desde 1979.

Los nacimientos en Estados Unidos han estado disminuyendo durante más de una década, experimentando un declive del 4% entre 2019 y 2020. Sin embargo, hubo un breve aumento durante los dos años siguientes, atribuido en parte a los embarazos postergados durante los primeros días de la pandemia.

Las tasas de natalidad han seguido una tendencia descendente entre las mujeres más jóvenes, mientras que han aumentado entre las mujeres de 30 a 40 años, reflejando una búsqueda de educación y carrera antes de la formación de una familia. Sin embargo, el año pasado, las tasas de natalidad disminuyeron para todas las mujeres menores de 40 años y se mantuvieron estables para las de 40 años.

La disminución en las tasas de natalidad se observó en casi todos los grupos raciales y étnicos, lo que sugiere un impacto generalizado.

Los datos provisionales de natalidad de 2023 podrían experimentar ajustes, pero los expertos no anticipan cambios significativos en la considerable disminución observada.

La decisión de la Corte Suprema de permitir a los estados restringir el aborto no parece haber tenido un impacto inmediato en el número de nacimientos a nivel nacional, aunque los efectos pueden variar entre estados y grupos demográficos.

El estancamiento en las tasas de natalidad entre los adolescentes plantea preocupaciones sobre la efectividad de los programas de educación sexual y acceso a anticonceptivos.

El análisis de los datos sugiere que factores como la vivienda, la seguridad laboral y el costo del cuidado infantil pueden estar obstaculizando los objetivos de tener más hijos para muchas parejas estadounidenses.