Bombardeos rusos dejan más de 30 muertos y destrozos en hospitales ucranianos

Una serie de bombardeos rusos en Ucrania resultó en la muerte de al menos 31 personas en diversas áreas del país. Entre los objetivos alcanzados se encontraban dos hospitales, uno de ellos especializado en pediatría, lo que generó una ola de condenas internacionales justo antes de la cumbre de la OTAN.

Los ataques han suscitado dudas sobre la capacidad de las defensas antiaéreas ucranianas, especialmente después de que bombardeos previos dañaran infraestructuras eléctricas y aeropuertos militares. El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, calificó los ataques como "terroristas" y mencionó que las ciudades de Kiev, Dnipró, Krivói Rog, Sloviansk y Kramatorsk fueron impactadas. En Kiev, al menos 17 personas murieron, y en un hospital pediátrico se registraron varios heridos, incluidos niños.

La región de Dnipropetrovsk también sufrió graves consecuencias, con 11 personas fallecidas, 10 de ellas en Krivói Rog. En Pokrovsk, cerca de la línea del frente, se registraron tres muertos y alrededor de 100 heridos en total en varias áreas. Las autoridades ucranianas y los servicios de seguridad atribuyeron los daños a misiles rusos, a pesar de que Rusia negó su responsabilidad, alegando que sus objetivos eran instalaciones militares.

La comunidad internacional reaccionó con dureza ante los ataques. El jefe de la diplomacia de la Unión Europea denunció la falta de piedad de Rusia hacia los civiles ucranianos. La coordinadora humanitaria de la ONU para Ucrania condenó enérgicamente los bombardeos, mientras que Zelenski, desde Polonia, exigió una respuesta más firme de las potencias occidentales. Durante su estancia en Polonia, Zelenski firmó un acuerdo de cooperación en materia de seguridad con el primer ministro polaco y ambos guardaron un minuto de silencio por las víctimas.

Con la cumbre de la OTAN en el horizonte, se espera que los líderes mundiales discutan formas de respaldar a Ucrania frente a la continua agresión rusa. La situación actual subraya la importancia de una respuesta internacional coordinada y efectiva para proteger a los civiles y estabilizar la región.